El Tottenham Hotspur anunció oficialmente la salida de su capitán y figura, Son Heung-Min, quien tras una década defendiendo la camiseta de los Spurs pone rumbo a Estados Unidos para unirse al LAFC de la Major League Soccer (MLS).
El delantero surcoreano, de 33 años, cierra una etapa histórica con el club londinense, en la que disputó 454 partidos y anotó 173 goles, convirtiéndose en uno de los máximos referentes del equipo en el siglo XXI. Su despedida llega tras coronarse campeón de la Europa League, título que levantó como capitán en la ciudad de Bilbao, en su último partido oficial con los Spurs.
Durante su carrera en Inglaterra, Son no solo brilló por sus números, sino también por su carisma y profesionalismo. En la temporada pasada sumó 11 goles y 12 asistencias, y a lo largo de los años obtuvo reconocimientos como la Bota de Oro de la Premier League y el Premio Puskás por su memorable gol en solitario ante el Burnley.
El presidente del club, Daniel Levy, dedicó emotivas palabras al atacante: “Sonny es uno de los mejores jugadores que ha vestido nuestra camiseta. Su talento, humildad e impacto tanto dentro como fuera del campo nos han dejado una huella imborrable. Verlo levantar la Europa League fue un momento mágico y el cierre perfecto a una era inolvidable”.
Con su traspaso al LAFC, Son inicia una nueva etapa en el fútbol estadounidense, mientras que Tottenham se prepara para afrontar la temporada 2025-2026 sin su ídolo. La salida de Son marca el fin de una era dorada para los Spurs, y deja un legado que será difícil de igualar. (GOAL)
