Desde su lecho en un hospital privado, Liliana Estrada, una de las cinco sobrevivientes del trágico accidente aéreo en Roatán que dejó 12 fallecidos, relató los momentos previos al siniestro y denunció la falta de apoyo por parte de la aerolínea responsable.
A través de un video difundido en redes sociales, Estrada aseguró que la aeronave ya presentaba fallas antes de despegar.
“El avión empezó a colear antes de alzar vuelo. Me dio tiempo de hablar con mi pareja y decirle que lo amaba, que algo estaba pasando. Eso fue lo último que pude decirle antes del impacto», expresó entre lágrimas.
La sobreviviente, quien sufrió múltiples lesiones, entre ellas fracturas en la pelvis y el tobillo, afirmó no recordar el momento exacto de la caída. Sin embargo, tiene presente los rostros de las víctimas y agradece a Dios y a los pescadores que la rescataron tras el siniestro.
Estrada también cuestionó la negligencia de la aerolínea, señalando que hasta el momento nadie se ha acercado para verificar su estado de salud.
“Es mi familia la que está cubriendo todos los gastos médicos. Nadie ha venido a preguntar si estoy viva o fuera de peligro”, denunció.
Según su testimonio, el vuelo estaba programado para las 5:40 p. m., pero los pasajeros fueron informados de un retraso de 25 minutos, que terminó siendo mayor.
“Nunca nos explicaron la razón del retraso, solo nos subieron al avión, aun sabiendo los riesgos”, añadió.
Conmovida por la tragedia, hizo un llamado a exigir justicia y que los responsables rindan cuentas.
“Es momento de alzar la voz. No es posible que nos dejen abandonados después de algo así”, concluyó Estrada.
Este accidente pone nuevamente en el centro del debate la seguridad aérea y la responsabilidad de las aerolíneas en la protección de sus pasajeros. Es fundamental que las autoridades correspondientes realicen una investigación exhaustiva para esclarecer las causas del siniestro y determinar si existió negligencia por parte de la empresa operadora.
