Tras el fin de la gestión de Laura Dogu, embajadora de Estados Unidos en Honduras hasta abril de este año, el cargo diplomático ha estado acéfalo. Sin embargo, las expectativas sobre quién será el nuevo funcionario a cargo son latentes. Recientemente se dio a conocer que la elección de la persona que ocupará la referida embajada se realizará una vez que las elecciones generales revelen quién será el próximo presidente o presidenta de la República.
La decisión es similar a la que se tomó con el nombramiento de Dogu en 2022, año en que se oficializó un nuevo embajador tras confirmarse que la presidenta Xiomara Castro tomaría las riendas del país luego de los comicios de ese entonces. Dogu presentó sus credenciales diplomáticas en abril de ese año ante el entonces canciller Eduardo Enrique Reina.
Durante su gestión, Laura Dogu desempeñó un papel activo en las relaciones bilaterales y fue reconocida por el gobierno hondureño con la Orden “José Cecilio del Valle” por su labor en el país.
“Me voy en un momento crucial para la historia democrática del país”, señaló la diplomática en su discurso de despedida, meses atrás. Actualmente, Roy Perrin funge como la máxima autoridad interina de la sede diplomática en Tegucigalpa.
El proceso para nombrar un embajador estadounidense implica la propuesta de un diplomático de carrera por parte del Departamento de Estado, la aprobación del Senado de EE. UU. y el beneplácito del país receptor, en este caso, del gobierno hondureño.
Eventualmente, se presentan las copias de estilo ante la Cancillería y las cartas credenciales ante el presidente.
Las relaciones entre Honduras y Estados Unidos han tenido algunos roces durante la actual administración; no obstante, desde la Cancillería del país han afirmado que los vínculos entre ambas naciones deben estar enmarcados en el respeto hacia las decisiones soberanas de cada Estado.
