El regreso al país de Alexander Ardón, exalcalde de El Paraíso, Copán, tras ser deportado por el gobierno de Estados Unidos, ha reactivado el debate sobre la reducción de penas a cambio de cooperación judicial, práctica común en el sistema norteamericano. Esto plantea una interrogante clave: ¿comparten los sistemas de justicia de EE. UU. y Honduras los mismos objetivos? Tras el regreso de Alexander Ardón, alcalde de El Paraíso, Copán, tras ser deportado por el gobierno de Estados Unidos, ha resurgido el debate sobre la reducción de penas por cooperación que brinda el gobierno estadounidense, lo que plantea la pregunta: ¿La justicia norteamericana tiene los mismos objetivos que la hondureña?
Alexander Ardón se entregó a la DEA en febrero de 2018 tras negociar su cooperación con la justicia estadounidense. Durante los procesos judiciales en Nueva York, admitió haber participado en el envío de toneladas de cocaína hacia Estados Unidos y aseguró que recibió dinero del narcotráfico para financiar campañas políticas en Honduras.
Junto con su hermano Hugo Ardón, conformaron el denominado “Cartel de los hermanos AA”, que operaba en los departamentos de Copán y Ocotepeque, donde controlaban rutas clave del tráfico de droga.
Ardón también confesó haber cobrado un “impuesto” por cada kilo de cocaína que transitaba por su jurisdicción.
Recientemente Actualmente las autoridades lo enviaron al Centro Penal de Tamara, en Francisco Morazán, mientras investigan sus delitos cometidos en territorio nacional. sus ilícitos en el país
Según el analista Oscar Estrada, su pronta liberación fue gracias a su cooperación en el juicio contra el exmandatario Juan Orlando Hernández.
Hondureños condenados
Al menos cCuatro hondureños han sido sentenciados a cadena perpetua en Estados Unidos y a otros les han dado condenas que van desde los dos, seis y hasta más de 30 años de prisión por delitos de tráfico de droga.
La lista la encabeza el exdiputado Juan Antonio “Tony” Hernández, Geovanny Fuentes, ambas resoluciones dictadas por el juez Kevin Castel; además, Héctor Emilio Fernández “Don H” y Sergio Neftalí Mejía Duarte. El desfile de hondureños por las cortes estadounidenses es largo y comenzó con Carlos Arnaldo Lobo, mejor conocido como el Negro, ya que fue el primer extraditado a Estados Unidos. En total, son 58 hombres y cinco mujeres los que han sido procesados o enjuiciados por la justicia estadounidense. Ocho han sido detenidos en otros países y 15 se entregaron voluntariamente.
Algunos ya cuentan con la libertad
1. Carlos Arnoldo “El Negro” Lobo: Conocido por ser uno de los principales narcotraficantes hondureños, fue visto disfrutando de su libertad en las playas de Miami, Estados Unidos, tras haber cumplido una condena de diez años por delitos relacionados con el narcotráfico.
“El Negro” Lobo, quien fue el primer hondureño extraditado legalmente a Estados Unidos por tráfico de drogas en 2014, fue captado en diversas fotografías junto a una mujer.
Nacido en Esparta, Atlántida, “El Negro” Lobo fue extraditado a Miami el 9 de mayo de 2014 para enfrentar acusaciones por conspirar para introducir cocaína a Estados Unidos.
Tras declararse culpable de narcotráfico en septiembre de 2014, “El Negro” Lobo fue condenado en diciembre del mismo año a 20 años de prisión.
Sin embargo, entre octubre de 2020 y marzo de 2021, se llevaron a cabo negociaciones secretas entre Lobo y la Fiscalía de Estados Unidos, lo que resultó en una modificación de su condena.
2. Fabio Lobo: Tras cumplir una pena de nueve años de prisión en Estados Unidos, la jueza Lorna G. Schofield firmó su libertad con dos años de supervisión y seguir las leyes de inmigración según las condiciones especiales dictadas por la corte.
Lobo fue arrestado en Haití en 2015 y se declaró culpable de cargos relacionados con el narcotráfico.
Su testimonio en febrero de 2024, durante el juicio del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, resultó clave para la condena de 45 años que recibió Hernández por delitos de narcotráfico.
La cooperación de Fabio con la Fiscalía de Estados Unidos, en especial su testimonio sobre los sobornos relacionados con el tráfico de drogas, le permitió una reducción significativa de su condena.
3. Bayron Ruiz: Fue condenado el 10 de septiembre de 2021 a cinco años de cárcel; sin embargo, su castigo se vio reducido en virtud de que firmó un acuerdo de culpabilidad y de colaboración con la Fiscalía de Nueva York.
Él era originario del departamento de Olancho y fue capturado en Guatemala el 20 de marzo de 2018 y extraditado a Nueva York el 5 de marzo de 2019.
En mayo de 2019, Ruiz se había declarado no culpable de los cargos de conspirar para introducir drogas en territorio estadounidense, pero meses después decidió admitir la responsabilidad en los cargos.
Ruiz fue asesinado el 12 de febrero del presente año en Guatemala. Según el informe policial, Ruiz resultó herido en un ataque armado y, minutos después, se confirmó su fallecimiento en un centro hospitalario.
¿La justicia estadounidense no comparte los mismos intereses que la hondureña?
Para el analista Según el analista Oscar Estrada, la lucha contra el narcotráfico que lleva EE.UU.stados Unidos tiene su propia lógica y sus propios objetivos, los cuales no son necesariamente los mismos que los de Honduras. La ley de Estados Unidos permite la colaboración eficaz, lo que les permite a estas personas salir en libertad antes de tiempo.
“La ley les permite esa especie de colaboración eficaz, lo cual se toma esto como una forma de ganar ciertos beneficios. Lo que Honduras debe evaluar es qué tanto de esos testimonios que brindan en los juicios pueden ser considerados como verídicos por las cortes en Honduras. En este momento se observará cómo la ley hondureña y la estadounidense califican de diversa manera un mismo hecho.”
Estrada considera que este podría ser apenas el inicio de un considerable número de liberaciones que se irán dando a conocer en el transcurso del año, ante la colaboración que están haciendo algunos hondureños en Estados Unidos, en la cual ninguno está excluido de poder colaborar.