La Secretaría de Salud de Honduras mantiene activa una alerta epidemiológica ante el riesgo latente de ingreso de casos de sarampión, en respuesta al aumento de contagios en varios países de la región. Aunque el país no reporta casos confirmados, las autoridades han adoptado un enfoque preventivo para evitar la reintroducción del virus.
La ministra de Salud, Carla Paredes, indicó que hasta la fecha se han procesado cerca de 20 pruebas diagnósticas, todas con resultado negativo, y que el Laboratorio de Inmunología de la institución es el único autorizado para este tipo de análisis.
En este momento no tenemos casos, pero estamos en vigilancia activa.
Carla Paredes, ministra de Salud.
Como parte de las acciones inmediatas, se exige a menores de 10 años procedentes de países con brotes activos presentar su carné de vacunación. En caso de no portarlo, se aplicará la vacuna en los puntos de entrada y salida del país, especialmente en aeropuertos.
La estrategia contempla además jornadas de vacunación abiertas a toda la población, con énfasis en menores de edad. La inmunización es gratuita y forma parte del Esquema Nacional de Vacunación.
Si bien las autoridades descartan por ahora el cierre de fronteras o terminales aéreas, advierten que las disposiciones podrían escalar en caso de que se declare una emergencia sanitaria.
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa, con síntomas como fiebre elevada, congestión nasal, conjuntivitis y erupciones cutáneas. Su prevención depende directamente de la cobertura vacunal.
Paredes hizo un llamado a la ciudadanía a no bajar la guardia y mantenerse informada.
No buscamos generar alarma, pero sí conciencia. El virus está cerca y la prevención es clave.
Carla Paredes, ministra de Salud.