Entre enero y octubre de 2025, Honduras recibió remesas por un total de 10,168.3 millones de dólares, lo que representa un incremento del 26.3 % en comparación con el mismo periodo del año pasado, informó el Banco Central de Honduras (BCH). Esta cifra refleja un aumento de más de 2,100 millones de dólares respecto a los 8,048.1 millones registrados en los primeros diez meses de 2024.
Solo en octubre, los envíos de dinero desde el exterior sumaron 1,088.1 millones de dólares, una ligera disminución frente a los 1,139 millones recibidos en septiembre, según el informe del BCH. Estos recursos continúan siendo un soporte vital para millones de familias hondureñas, especialmente en áreas de alimentación, salud y educación.
Estados Unidos se mantiene como el principal origen de las remesas, aportando más del 80 % del total. Se estima que alrededor de 1.8 millones de hondureños, entre documentados e indocumentados, contribuyen a este flujo económico. España ocupa el segundo lugar con un 10.2 %, mientras que México, Canadá, Costa Rica, Panamá y Alemania suman el 4.5 % restante.
El informe destaca que las madres son las principales receptoras de estos recursos, representando más del 37 % de los beneficiarios. Además de los envíos regulares, muchas familias reciben transferencias extraordinarias para cubrir gastos de construcción, adquisición de vivienda o terrenos, celebraciones familiares y servicios médicos o funerarios.
El impacto de las remesas en la economía hondureña es significativo: representan más del 25 % del Producto Interno Bruto (PIB) y constituyen la principal fuente de divisas del país, superando incluso a las exportaciones y a la inversión extranjera directa. Se estima que más del 60 % de la población vive en condiciones de pobreza, por lo que estos recursos son esenciales para el consumo y la estabilidad macroeconómica de los hogares.
En 2024, Honduras recibió 9,743 millones de dólares en remesas y, de acuerdo con las proyecciones del BCH, este año se espera que la cifra total supere los 10,200 millones, consolidando su papel como columna vertebral de la economía familiar y nacional.
