La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, visitó este miércoles la cárcel de máxima seguridad en El Salvador, destacando la importancia de la colaboración entre ambos países en la lucha contra el crimen transnacional.
El recorrido tuvo lugar en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), donde se encuentran recluidos más de 200 migrantes venezolanos expulsados de EE. UU. tras ser señalados de pertenecer a la organización delictiva Tren de Aragua. Noem, quien llegó a El Salvador en una visita oficial, fue recibida por el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro.
Acompañada por un fuerte dispositivo de seguridad, la funcionaria inspeccionó diversas áreas del penal, incluyendo la zona de admisión, el almacén de armamento y la celda 8, donde están recluidos algunos de los presuntos integrantes de la banda. Además, se reunió con líderes de pandillas salvadoreñas que también cumplen condenas en la prisión.
En declaraciones compartidas en sus redes sociales, Noem enfatizó que esta acción envía un mensaje claro:
Si ingresan ilegalmente a EE. UU. y cometen delitos, serán expulsados y procesados. Esta cárcel es una de las herramientas que utilizaremos contra quienes amenacen la seguridad de nuestro país”.
Tras su recorrido por el Cecot, la secretaria de Seguridad tenía previsto reunirse en privado con el presidente Nayib Bukele para discutir la posibilidad de fortalecer el esquema de expulsiones de migrantes y su reclusión en El Salvador.
Esta visita representa un nuevo acercamiento entre ambos gobiernos en materia de seguridad, luego de que en febrero el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, también sostuviera un encuentro con Bukele. En esa ocasión, el mandatario salvadoreño ofreció su sistema penitenciario para recibir a criminales condenados, aunque sin referencias específicas a migrantes en situación irregular.
El pasado 16 de marzo, el gobierno de Donald Trump deportó a más de 200 venezolanos bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, pese a una orden judicial en contra. Sin embargo, medios estadounidenses han señalado que al menos 101 de ellos habrían sido detenidos en procesos migratorios y no necesariamente por delitos violentos.
Hasta la fecha, el gobierno salvadoreño no ha esclarecido bajo qué marco legal mantiene a estos migrantes en el Cecot, ya que no existen órdenes de captura ni procesos penales en su contra dentro del país, ni un acuerdo legislativo que respalde su encarcelamiento.

